En la costa de Nobbys beach en Nueva Gales del Sur, Australia, un buzo de nombre Rick Anderson ha desarrollado una amistad con una ejemplar hembra de tiburón Port Jackson. Las imágenes logradas de este peculiar encuentro muestran un abrazo entre ellos.
Lejos del concepto negativo que transmite la idea de nadar entre tiburones, este individuo se atreve a sentir los cariños de una singular especie en medio de la fauna marina. Cabe decir que estos encuentros trascienden en el tiempo.
«Empecé a jugar con ella hace unos siete años cuando era apenas una cría de aproximadamente 6 pulgadas de largo. Me acerqué a ella con cuidado para no asustarla, a continuación, la comencé a acariciar suavemente. Una vez que se acostumbró a mí, me gusta acunarla en la mano y hablarle con dulzura a través de mi regulador» menciona Rick.
Al parecer, este tipo de tiburón goza de una memoria ejemplar dentro de los escualos que permite pensar que ella no olvida a Rick a pesar del inexorable tiempo. Para el buzo que se ha hecho famoso por las redes sociales, ambos se reconocen al verse.
«Hice esto cada vez en la primera temporada que estuvo aquí. Entonces a lo largo de las siguientes temporadas, ella me reconoce y nada hacia mí para darme una palmadita y acariciarme», así resume su primer encuentro Rick.
«Ella pronto se acostumbró a mí, hasta el punto que nada hacia mí cuando estoy pasando por ahí, y toca mis piernas hasta que la sostengo en mis brazos para que ella se acueste para darle un abrazo» mencionó Rick.
En las oportunidades en que Rick ha sido acompañado por otros buzos, estos no han podido creerlo al verlo de primera instancia. No todos los días se observa un abrazo de este tipo.
«No me alimento de ella ni de ninguno de los otros tiburones con los que juego, básicamente los trato como si fueran un perro» dice Rick a un medio de comunicación. Vale decir que este buzo tiene su propia escuela para este tipo de actividad.
«Siempre me he sentido cómodo al nadar con estos animales» colocó en sus redes sociales el valiente buzo que también ha hecho lo mismo en compañía de otros tiburones. Solo que a estos todavía no los abraza.
